Colón Estudió las Rutas Marítimas

A finales del siglo XV, los portugueses le habían ganado a España en la búsqueda de una nueva ruta hacia las Indias para traer las valiosas especias, tan necesarias en Europa. Cristóbal Colón analizó diversas teorías y descubrimientos y concluyó que navegando en sentido contrario se podía llegar al mismo punto debido a la redondez de la Tierra. De acuerdo con esta teoría, se podía llegar a oriente avanzando lo suficiente en la dirección opuesta; es decir, hacia el occidente.

Colón ante los Reyes Católicos

Colón buscó apoyo económico para realizar su proyecto de llegar a las indias por otra ruta. Primero fue con el rey de Portugal, quien le negó la ayuda, por lo que se dirigió a Castilla, a entrevistarse con los Reyes Católicos. Colón le explicó su razonamiento basado en la redondez de la Tierra y la riqueza que se obtendría de encontrarse una nueva ruta a las Indias. Los monarcas se interesaron por el proyecto, en especial la reina Isabel, quien le dio cartas para que se presentara en la villa de Palos, a fin de que la población le ayudara en los preparativos de su viaje.

El Puerto de Palos

Colón se encontró con la desconfianza de los habitantes de la villa de Palos, a pesar de que se les presentó las cartas que le había dado la reina. Cuando intentó reclutar marinos para su tripulación, tuvo también muchos problemas. Fue cunado conoció a Martín Alonso Pinzón, un marinero muy respetado en el puerto de Palos que le ayudó a reclutar su tripulación y aportó de su riqueza personal para el viaje. Colón zarpó llevando tres carabelas: la Niña, la Pinta y la Santa María. Llegó a la isla de Guanahaní, creyendo que había llegado a las Indias. Por eso llamó "indios" a los aborígenes.

Avistamiento de Guanahaní

En Europa tenían mucho valor las mercancías traídas de Oriente, especialmente las especias de la Indias, entre ellas la pimienta, el comino y el clavo, que se utilizaban para acentuar el sabor de la comida y, por su fuerte olor, sirve para disfrazar sabores muy fuertes, como el de la carne no muy fresca. Por eso en los países cálidos de Europa eran muy apreciadas, pues se utilizaban mucho para cocinar. En el siglo XV, la ruta para llegar a Oriente era recorriendo el mar Mediterráneo hasta Constantinopla y de ahí seguir por tierra, pero cuando los turcos se apoderaron de esos territorios, la ruta se cerró para los europeos. Una opción era rodear la costa de África, lo que implicaba un viaje larguísimo. Esa era la razón por la que tanto portugueses como españoles ubicaban nuevas rutas para llegar a las Indias. Cristóbal Colón era un navegante ambicioso que, después de estudiar mucho, concluyo que se podía llegar al mismo punto navegando hacia el otro lado, pues la Tierra es redonda. Llevo su idea y proyecto ante el rey de Portugal para conseguir ayuda económica, pero no lo logró. Fue entonces con los Reyes Católicos, de España, quienes lo apoyaron y el 3 de agosto de 1492. Colón partió del puerto de Palos con tres carabelas: la Niña, la Pinta y la Santa María. Enfrentó varias dificultades durante el viaje, que resultó más largo de lo que había calculado, lo que despertó el miedo de los marineros, que intentaron amotinarse varias veces, sin éxito. El 12 de octubre, el grumete Rodrigo de Triana dio el grito de "¡Tierra a la Vista!" al avistar la isla de Guanahaní, a la que Colón bautizo como San Salvador. De ahí siguieron hasta las islas de Cuba y La Española, donde se hundió la Santa María, por lo que tuvieron que regresar a España con sólo dos carabelas. Colón se presentó ante los Reyes Católicos, quienes lo recibieron con grandes muestras de júbilo por la riqueza que representaba el descubrimiento de esa tierra. Volvió a viajar hacia la nueva tierra en 1493, luego en 1498 y, por último, en 1502. En total realizó cuatro viajes, pero murió sin saber que en realidad había descubierto un nuevo continente. Quien supo que se trataba de un continente fue el navegante italiano Américo Vespuccio, por eso los cartógrafos empezaron a llamar en sus mapas "América" al Nuevo Mundo.

De Regreso ante la Corte Española

Colón regresó a Europa sólo con dos de sus carabelas debido a que la Santa María se hundió frente a la isla La Española. En abril de 1493, los Reyes Católicos lo recibieron en Barcelona, junto con toda su corte y con grandes muestras de júbilo. Colón presentó ante ellos a algunos aborígenes, junto con los animales desconocidos en Europa, además de utensilios, adornos y, sobre todo, oro en diferentes formas. Colón realizó en total cuatro viajes a América, siempre con la idea que había llegado a las Indias.

Viajes de Américo Vespuccio

Américo Vespuccio fue un navegante italiano muy preparado que conoció a Colón después de su segundo viaje al Nuevo Mundo. Hizo un viaje por encargo del rey de España para corroborar las afirmaciones de Colón respecto a sus hallazgos. Realizó por lo menos otro viaje, éste por encomienda del rey de Portugal. Luego de estas experiencias, concluyó que la tierra descubierta por Colón no era parte de las Indias, si no un nuevo continente, lo que cambió la perspectiva de comprar especias por la de conquistar esos territorios.