Horóscopo Occidental
Compatibilidad de Leo con otros signos
 

Aries: El flechazo del amor entre estos dos signos surge de inmediato y puede durar para siempre porque se admiran y respetan. Hay erotismo, pasión y celos, pero son felices.

Tauro: La atracción sexual es natural, por su temperamento, pero no existe en ellos ninguna otra afinidad. Leo no soportará por mucho tiempo la lentitud del toro.

Géminis: Se llevan bastante bien, a pesar de sus metas tan distintas. Leo exige sumisión y halagos. Géminis le da por su lado un poco socarronamente. Y el amor termina derribando barreras.

Cáncer: Su relación es similar a la de sus planetas Sol y Luna. Se pueden llegar a complementar si sus ascendentes son de elementos compatibles. De otra manera, sólo serán amigos.

Leo: La relación entre signos iguales requiere de paciencia y buena voluntad. Uno odia sus propios defectos y soportarlos en otra persona a veces es insufrible. Empiece amándose a sí mismo.

Virgo: Esta relación saca chispas. No se soportan uno al otro. Sólo es posible la amistad y eso si no se frecuentan muy seguido. Guardar distancia entre ellos es lo mejor.

Libra: Buena relación, sobre todo porque se entienden intelectual y espiritualmente. En todo lo demás tendrán que adaptarse y hacer concesiones mutuas.

Escorpión: No se soportan el uno al otro. El veneno de Escorpión es mortal para Leo y no existe ningún antídoto. Ambos son muy susceptibles y piensan totalmente diferente.

Sagitario: La pasión de ambos es incontenible y llega a fundirse en una sola. Los dos son igual de sinceros, se admiran y se respetan. Su unión es una de las más duraderas.

Capricornio: Es difícil que se lleven bien porque ambos son impositivos. Hacen un consistente equipo de trabajo y una buena amistad. Pero en amor acabarán a la greña y muy heridos.

Acuario: Lazos amistosos y admiración mutua. Por ser signos opuestos pueden odiarse o llegar a entenderse a la perfección. Hay que recordar que Acuario puede ser también su enemigo declarado.

Piscis: No tienen nada que en común aunque coincidan en algunos puntos, como su sensibilidad. Sólo es posible una amistad duradera ya que ninguno cederá a las presiones del otro.